Cada año, al recordar el nacimiento de la Madre Teresa de Calcuta, en nuestro país se celebra el “Día de la Solidaridad”. El testimonio de esta gran mujer, que supo encarnar el dolor de los más pobres y entregar su vida por ellos, nos interpela individual y socialmente y nos lleva a preguntarnos qué podemos hacer, desde el lugar concreto en el que vivimos y trabajamos, para avanzar en la transformación de las situaciones de injusticia e inequidad que aún persisten en nuestra patria.
La Solidaridad es proximidad y ayuda al prójimo, es la mano que responde ante las necesidades y llega a su máxima expresión cuando quien ayuda se compromete con la causa de la exclusión y la pobreza.
Construir una sociedad que nos incluya a todos necesita de una decisión comprometida con la realidad de pobreza que viven muchos hermanos, por eso Cáritas agradece, especialmente en este día, a todos aquellos que de una u otra manera se suman en la búsqueda del bien común:
- Personas, empresas, instituciones y medios de comunicación que ofrecen su tiempo, su aporte, sus conocimientos.
- Voluntarios que impulsan la animación de las diferentes actividades de Cáritas.
- A todas las personas que con su generosidad se suman a este proyecto común de construir una sociedad diferente basada en los valores de la justicia, la equidad y la dignidad.
“Los pobres son la esperanza del mundo, porque nos proporcionan la posibilidad de amar a Dios a través de ellos”
Madre Teresa de Calcuta
Cáritas Basílica Natividad