El cambio de gestión provincial significó un significativo retroceso en el proyecto de "Ruta Segura" en ruta 70 para nuestra ciudad y la región.
No sólo el proyectado ensanche de la ruta 70 en la traza urbana de la ciudad quedó en el olvido, la iluminación de ingreso Este es un verdadero aquelarre: columnas que no respetan líneas de banquina, sin guardar alineación horizontal y de diferente altura a las existentes. Todavía no conocemos como se realizará la obra en el tramo de calle Amado Aufranc y si se solucionarán los desniveles existentes para cruces de calles.
No sólo la ciudad se quedó sin ensanche urbano de la ruta 70, también Humboldt se quedó sin rotonda.
El trabajo de repavimentación que se observa en la zona comprendida entre el Bar de Copes y la Fábrica Gonella no comprende ni las banquinas pavimentadas prometidas, ni el tercer carril y mucho menos el cuarto. Tampoco se observan trabajos de cierre del canal de desagüe frente a la fábrica Gonella que se había comenzado en la gestión anterior.
Si bien el repavimentado puede verse como un avance mientras el Corredor Vial ya nos cobra $ 900 para transitar por la ciudad, la obra que garantizaba desarrollo e infraestructura, quedó atrás.
Muy pocas personas conocieron el proyecto técnico de "Ruta 70 Segura" que realizó la misma empresa que ganó la licitación. Una locura fue la no intervención de técnicos de Vialidad e Hídrica en el mismo. Pero de la promesa de cuatro carriles, rotondas e iluminación, pasamos a un costoso maquillaje.
La obra continúa y ya vendrán las fotos de funcionarios junto a las máquinas y las promesas que en los próximos años llegarán las obras que entreguen mayor seguridad a los vecinos de la ciudad. Quizás la promesa llegue sobre el final de esta gestión y la próxima la vuelva a cambiar por un nuevo maquillaje.