Hasta en aquella madrugada de Japón Corea 2002 se pudo celebrar al menos el triunfo en el partido contra Nigeria en la clásica esquina de Sarmiento y Aaron Castellanos más allá de la pronta eliminación de la Selección de Bielsa en primera ronda.
Argentina cayó sin atenuantes ante Croacia por 3 a 0 en la segunda fecha del Grupo D de la Copa del Mundo en el estadio de Nizhny Novgorod, donde nuevamente fue local en las tribunas y visitante en el campo de juego, dejando abierta la puerta para un inminente fin de ciclo de esta generación de futbolistas liderada por Lionel Messi a la que solamente un milagro futbolero la puede depositar en los Octavos de Final de este certamen a los que ya se clasificó su rival de hoy.
La esquina de Sarmiento y Aaron Castellanos es el "Obelisco" para la ciudad como símbolo a la hora de celebrar triunfos o momentos de felicidad que encierra a la comunidad.
La siesta se vio interrumpida por el partido de Argentina y pronto la primera colonia agrícola organizada del país quedó inmersa en noventa minutos de fútbol a la espera de un triunfo para salir a celebrar como tantas veces pasó.
Lo cierto es que Argentina perdió su primer partido en Rusia y después del empate en el inicio de la competencia debe ahora esperar el resto de los resultados en el grupo para poder sortear la fase y pasar a Octavos de Final.
Más allá de lo sucedido en el campo de juego, la esquina de Sarmiento y Aaron Castellanos aguarda por bocinazos, cantos, banderas y abrazos como tantas veces paso y espera vuelva a suceder.